Esta exposición es la culminación del programa pedagógico Somos do Sexto, formulado como un diseño guiado de un proyecto museográfico por parte de un grupo de niños y niñas de primaria. A través de una metodología activa, conocieron las colecciones del Museo de Pontevedra e intervinieron en un comisariado de arte. Se fomentó su interés por el arte y se familiarizaron con el proceso expositivo. Los pequeños seleccionaron las obras, se documentaron sobre ellas e identificaron las temáticas que prenden su esquema de proyecto, también elaboraron el discurso narrativo y decidieron los dispositivos y elementos de la muestra.
La exposición es la parte visible del iceberg que supuso el proceso de trabajo conjunto entre el equipo de Somos do Sexto, porque camino y destino son caras de la misma moneda.
El montaje se articula en tres secciones: espacio, tiempo y cuerpo, con el referente de la belleza oculta. Comisariar una colección permanente de arte conlleva un proceso de desconstrucción y traducción de lo que dice cada obra. O de lo que le dice a cada uno, porque las obras no hablan lo mismo para todos y todas nosotros.
Con esta muestra, a caballo entre lo didáctico y lo ambiental, se busca la emoción y que el espectador se haga preguntas y formule sus respuestas: